MUJERES CON ESTILO UNICO: CAROLYN BESSETTE KENNEDY

Si su vida fuera llevada a la pantalla,

la candidata ideal para interpretarla sería la bella Blake Lively,

con quien guarda notable parecido.

Desde que saltó a la fama aquel fin de semana en Hyannis Port donde la retrataron junto al bello John-John Kennedy su vida no sería la misma.

A partir de allí millones de mujeres del orbe depositarían los ojos en ella.

Querían imitarla y develar su secreto para conquistar el corazón del soltero más codiciado

CAROLYN ESTILO WEEK-END

EN HYANNIS PORT Y MARTHA’S VINEYARD

Cada uno de sus movimientos fue monitoreado al milímetro.

El mundo necesitaba una nueva Jackie a quien admirar y copiar.

Su figura e innegable estilo fueron su pasaporte directo a convertirse primero en personal shopper (asesora de moda para clientes VIP) de la sede central de Calvin Klein en Manhattan

y muy pronto escaló al puesto de “publicista” de la célebre marca americana.

Chica bien, carismática y con clase pronto se convertiría en amiga de

Kelly Klein, esposa de Calvin.

quien sería la celestina en cuestión y le presentaría al JFK Jr : soltero de oro

y cliente de la firma.

El resto es historia.

Carolyn era la mujer de su vida y quería demostrárselo a ella y al mundo.

Para muchos: estirada y distante

para otros: cálida y encantadora

para el mundo: sofisticada y chic

Carolyn, poco a poco, fue transformándose en el epitome de elegancia que hubiera enorgullecido a su suegra, la incomparable Jacqueline Bouvier Kennedy Onnassis.

Jackie no conoció a Carolyn, pero su hermana Lee Bouvier Radziwill, sí lo hizo.

Y en esta foto parece encantada de compartir una velada de ballet con su sobrina política.

Dando así su tácito beneplácito a la elección de su sobrino John.

Recordemos que el Anthony Radziwill, único hijo de Lee Radziwill , no sólo era primo hermano de John, sino que además era su mejor amigo y padrino de su boda.

Anthony Radziwill se había casado con una joven de clase media llamada Carole quien se convirtió en una de las mejores amigas de Carolyn dentro de su familia política.

En su libro “What remains”

Carole nos describe a una Carolyn

más cercana,

humana,

cariñosa,

con gran sentido del humor

y con gran personalidad

Y menciona el anillo de compromiso que John le regalara en 4 de julio de 1995 mientras pasaban el fin de semana pescando en Martha's Vineyard

EL ANILLO DE COMPROMISO

Una argolla de platino adornada con diamantes y zafiros, copia fiel de una anillo que solía usar Jackie al que llamaba su "swimming ring".

El anillo no fue del agrado de Carolyn... las gemas de colores no eran su estilo...

John se había dejado llevar por la influencia materna, no sabiendo interpretar que Carolyn hubiese preferido un solitario de diamante.

Su estilo era “basics”: el negro y el blanco eran su caballito de batalla y su paso por Calvin Klein le otorgó el toque minimalista que ella supo cultivar como representante de la marca y fuera de ella.

Al poco de dar sus pasos como publicista le hicieron un entrevista donde lo confirmaba posando con una simple camisa blanca, de la cual hizo un culto al igual que la camisa negra.

ESTILO "BASICS": BLANCO Y NEGRO

CULTO A LA CAMISA BLANCA

Carolyn se convirtió en objeto de admiración y gurú de la moda de los 90'

Aquí al último grito con tapado negro Prada y botas de diseñador en gamuza negra con taco chino.

¡Todo una precursora!

Entre sus fieles seguidoras se encontraba la ascendente Gwyneth Paltrow quien sin tener un estilo definido, era copia fiel de lo que imponía su ídola, tratando de imitarla demostrando así su admiración.

Consciente de la presión que conlleva ser una Kennedy y de las expectativas que generaba su rol de esposa consorte,

Carolyn comenzó a ceder al peso de la mirada pública

RoseMarie Terenzio, asistente personal de John y gran amiga de Carolyn, cuenta en su libro "Fairy Tale interrupted" que CBK sólo usaba prendas de diseñador y que luego de usarlas por un tiempo las donaba.

RoseMarie heredó el tapado imitación leopardo que Carolyn compró en un mercado de pulgas de Paris. Carolyn la llevaba de compras y solía regalarle hermosas prendas.

Y para su 31 cumpleaños, Carolyn le organizó una fiesta en el bar del Soho donde se encontraban semanalmente a compartir una charla de amigas.

PRENDAS DE DISEÑADOR

Carolyn era una visionaria de la moda y le gustaba descubrir nuevos talentos. Como lo hiciera en 1996 al elegir al entonces ignoto diseñador Narciso Rodriguez para que realizara su traje de novia y catapultarlo al estrellato.

Aquí, en una instantánea de 1998 paseando por Mannhattan.

En esta ocasión la vemos luciendo un diseño de Yohji Yamamoto

TAPADOS Y ABRIGOS PRADA

Había construido su imagen y apuntalado su estilo y se decantaba por prendas

y accesorios de calidad y marca.

Sus carteras Birkin de Hermes, Prada y Kate Spade se convertirían en su marca registrada.

Y al igual que Jackie O. ,

impuso un modelo de gafas de sol que marcaron tendencia.

modelo en carey marrón de la diseñadora Selima Aldo

CAROLYN Y SU CABELLERA

Es sabido que Carolyn cuidaba su espléndida cabellera con esmero aplicándose los mejores productos del mercado recomendados por su estilista Brad Johns y que asistía a su salón cada 6 días a retocarse las raíces con reflejos en tono rubio nórdico, que tan bien le sentaban.